Llegando a Forks fuimos a comer a Lodge, los licántropos tenian hambre, Esme, Nessie, Alec y yo no comimos nada. Los lobos ordenaron su comida y empezamos a charlar.
-Entonces ¿hay muchas lobas?-preguntó Alec a Leah
-No, soy solo yo-bufó Leah, Alec se mordió el labio
-Entonces...¿eres única?-volvio a preguntar Alec
-Si, soy única ¿y?-dijo enojada y voltendo la mirada
"Una loba en el armario..." pensé
-Ok, vengo, voy al baño-dije
-Yo tambien-dijo Alec parandosé de su asiento, fuimos al baño respectivo cada quien, entré a un baño, cerré la puerta y me recargué en la pared, me pusé a pensar.
-Hermosa-dijo Alec saltando de la ventana del baño hacia mi
-Haha ¿no se supone debes estar en el de hombres?-dije riendo
-Mmm, sip, pero quería estar contigo-dijo acercandosé a mi, me recargué más en la pared, estampó sus labios con los mios, sus brazos rodearon mi cintura y me apretó contra él, puse mis manos sobre sus hombros, me dejo de besar y pasó sus labios a mi cuello.
-Alec-dije jadeante
-¿Si?-preguntó
-Hay que quedarnos aqui, para siempre, o irnos al Polo Norte, allá no nos pasará nada, nadie nos localizará-dije tratanto de recuperar la respiración
-Como digas-dijo besando mi cuello
-Alec...te amo-dije, ¡como si no fuera obvio que lo amaba!
-Tambien-respondío, por fin me soltó, oí como alguien rezaba o decia algo en murmullos afuera-es mejor que me vallá-dijo Alec
-No-respondí-quedate conmigo, lo jalé y lo besé el respondió a mi beso, despues deslizó sus labios a mi cuello y me abrazo por la cintura, me soltó-nos vemos en la mesa-dijo saltando por la ventana, asentí y salí del baño, afuera estaba la señora Drewber, una viejecita devota de la iglesia que vivia cerca del hospital donde trabajaba papá, siempre nos miraba a Alec y a mi con mirada reprobatoria.
-¡Hola "ñora"!-grité-¿como le va?-la señora Drewber me miró asustada, creo que oyó toooda nuestra conversación mia y de Alec, la señora salió corriendo, me encogí de hombros, me lave las manos y salí.
Esme y yo pagamos la cuenta de la comida, los demás ya se habian adelantado, ibamos saliendo cuando vi un rostro familiar.
-Oh, hola Hannah-dijo Monique, iba con su madre
-Hola Monique-respondí a su saludo
-¡Oh! Hola señora Cullen-dijo la señora Stanley a Esme-Soy Kikki Stanley, mucho gusto-dijo estrechando su mano, se sobresaltó al sentir la mano de mamá
-Gracias, es un placer-respondió Esme educadamente
-Que bueno que las encuentro señora, quería pedirle permiso para que su...hija Hannah vaya a la fiesta de pijamas de mi hija, es que mañana es su cumpleaños número 16 y Monique me pidio que hicieramos una pijamada con tooodas sus amigas-me volteó a ver la señora Stanley-y bueno ya sabe, tengo que pedirle permiso a la madre si tienen 16 apenas ¿no?-empezó a reir, Esme tambien
-Bueno, si Hannah quiere ir no veo porque no-dijo Esme dirigiendome una mirada cálida
-Porfa, quiero ir-dije rogando como típica adolescente
-Muy bien, la llevaré a eso de las 6:00 PM-dijo Esme-muchas gracias Kikki, adiós Monique-
-Adiós señora Cullen, adiós Hannah-dijo Monique
-Bye-respondí. Salimos del restaurante.
30 de noviembre, 7:30 AM: escuela. Llegué y fui directo a mi casillero, empecé a sacar mis cosas, oí voces masculinas.
-¿Qué onda fenomeno? ¿Como va la vida con las ratas esas Cullen?-dijo un chico, apreté mis dientes y volteé a ver quien era
-Hannah ¿Como esta ese...como se dice? Si, esos fenomenos con los que vives...¡Ah si! ¿Como esta ese "elfo" que tienes de hermana? Alice ¿no?-dijo Duncan, uno de los chicos que me molestaban a diario
-Si Hannah, y esa preciosidad de hermana...¡Rosalie! Por cierto, ya le perdí el miedo a tu hermano ese, el grandote, Emmett, desde que lo conocí cuando iba en 2° de secundaria le perdí el miedo a Drácula y Frankenstein, sinceramente, tu familia da más miedo-dijo Jeoff, el otro fastidioso, pude oír como al otro lado del pasillo, Jonathan, un torpe y estúpido gordo de la clase de Biología se burlaba de mi familia, me dieron ganas de llorar
-¡¡¡Dejala en paz Jeoff!!!-dijo una voz atrás de mi, vi por encima de mi hombro, era Adam Thompson
-Ay que miedo, es Adam el de Florida-dijo Duncan
-Dejála-gritó Adam colocandome atrás de él
-Si no quiero que-dijo Duncan de nuevo
-Te enfrentas conmigo idiota-dijo Alec desde atrás
-Este no es tu asunto-le gritó Jeoff
-Pero si mio-dio Adam dandole a Jeoff un puñetazo en la boca, le saco un diente, me sobresalté. Sabia que no corría el riesgo de oler la sangre de su diente y almorzar humano porque yo bebía sangre desde hace casi 100 años, pero me preocupaba Alec.
-¡Adam!-grité espantada, Alec empezó a oler la sangre de su diente
-Alec, vete, corre-le grité, el se fue corriendo, no se a donde, pero huyó
-¡Me las vas a pagar Thompson!-amenazó Jeoff con la mano en la boca mientras Duncan lo llevaba a la enfermería, Jonathan se quedo boquiabierto, yo di un paso hacia adelante amenazandolo y el huyó, me fui a mi clase de Español.
Por fin habian terminado las clases, me dirigia al estacionamiento, ya me urgia irme, no queria tener que hablar con Adam del asunto, lo habia tratado de evitar durante tooodo el día.
-Hannah, veo que te quedaste sin trasporte-me gritó Adam desde atrás, pusé los ojos en blanco
-Si, es verdad, Alec tuvo que salir, es...alergico al olor de la sangre o algo así, el asintió
-¿Te llevo?-se ofreció
-Oh, ok, claro-tartamudeé
-Bueno, en realidad no tengo auto, pero me referia a que si quieres que te vaya a dejar a tu casa-
-Oh no no no, no gracias, no es necesario, esta muy lejos y...-trate de librarme
-Por favor-insistió-sería un placer llevarte
-Ok-acepté.
Sinceramente Adam me gustaba, me parecía lindo, ¿Y a quien no? era rubio, de hermosos y profundos ojos azules, alto...recuerdo cuando llegó a la escuela, se me acercó y me invitó a salir, aún estando Alec presenté, yo lo rechazé, me sorprendio que aun tenía esperanza, caminamos hacia el bosque mientras el me hablaba sobre las razones por las que golpeó a Jeoff, yo no le hacia caso, solo veia en suelo hasta que por fin nos detuvimos en un claro.
-Disculpa, no te pregunté donde era tu casa, no me percaté de que habiamos llegado aqui-dijo Adam
-Oh, no te preocupes, en realidad, puedo seguir sola-respondí
-No, por favor quedaté, bueno, te tengo que decir algo-dijo, ¡Oh no! pensé, me iba a confesar su amor o algo así-es que, bueno, yo...te amo Hannah, haría lo que fuera por ti, esa fue la razón por la que golpeé a Jeoff, para defenderte. A ellos no les importa que seas una chica, solo quieren molestar y...-
-Adam, sabes que estoy con Alec y...-lo interrumpí
-Hannah, eso no me importa, yo te amo-dijo estampando sus labios con los mios, rodeo mi cintura con sus brazos, fue un lindo beso, era muy dulce, Alec era el mejor besador pero sin duda Adam tenía el segundo lugar, me soltó, me dio otros pequeños, uno, dos, tres, cuatro.
-Nena, estas fría-dijo al fin, yo lo jalé hacia mi y lo besé, rodee su cuello con mis brazos, el rodeo mi cintura con los suyos y me aferro a él. No me puse a pensar en lo que diría Alec.
Cap.61 Bienvenido Jackson.
Hace 13 años
No hay comentarios:
Publicar un comentario